Hace unos 200 años llegaron los chinos. Los comerciantes, trabajadores y pescadores llegaron en busca de nuevas oportunidades y enseguida empezaron a comerciar con familiares de otros puertos asiáticos, así como con las colonias británicas. La ciudad de Koh Lanta está ocupada predominantemente por familias tailandesas-chinas, quienes descienden de aquel asentamiento original, y donde hoy en día puede verse el único templo chino de la isla.
Durante la década de 1980 los mochileros, buceadores y el turismo escandinavo descubrieron la isla, y aquello fue la semilla que hizo desarrollar este lugar y convertirla en el destino turístico popular que es hoy en día.
En 1996 se instaló la red eléctrica que conecta con la Tailandia continental, se utilizaron los ferries y en el año 2001 se instaló la primera línea telefónica.