La fiebre tifoidea es una enfermedad infecciosa aguda provocada por una bacteria, la bacteria tifoidea salmonella typhi, y se produce por consumir bebidas y alimentos contaminados. El contagio entre personas es poco frecuente aunque algunas moscas pueden ser transmisoras. Es una enfermedad exclusiva del hombre.
La bacteria se suele encontrar en verduras regadas con aguas fecales, en mariscos que crecen cerca de aguas residuales, en los huevos, leche, derivados lácteos o en algunas carnes. Esta enfermedad es muy común en los países con condiciones higiénico sanitarias deficientes.
El primer síntoma es la pérdida de apetito, dolor de cabeza y estreñimiento, llegando después de unos 3 o 4 días a tener hasta 40 grados de fiebre. Pueden aparecer sarpullidos rojos en la piel, oscurecimiento de la lengua, úlceras en el paladar, diarrea y haber momentos de perdida de conciencia. Si la enfermedad se complica se puede llegar a tener hemorragias gastrointestinales o problemas cardíacos.